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Segundo Cerebro, la Mente Sensible: Unirnos con nuestro Universo Interior 2

Entrenando al Segundo Cerebro El Cerebro Abdominal consume menos energía y puede realizar gran parte del trabajo cotidiano, como enviar y recibir registros de impulsos, experimentar emociones y reaccionar a ellas. Cuando hacemos descender la Mente Superior al Cerebro Abdominal/ la Mente Sensible se reduce la presión sanguínea y la ansiedad.

DIAS Y HORARIOS:

Sábado 14/03/2020 - 10:00 hs. a 13:00 hs.

Profundizando en la experiencia y prácticas en Segundo Cerebro 1.
 
La salud se considera el resultado natural de la confianza en uno mismo y de asumir la responsabilidad por la propia vida, por las propias actitudes y conductas.
Para que se de este estado es preciso superar los estancamientos que impiden el libre flujo de Energía y recuperar la espontaneidad natural del movimiento energético de nuestro cuerpo y mente.
El cuerpo físico no puede ser considerado independiente del cuerpo del Universo, como si uno pudiera respirar y vivir sin el otro. La visión taoísta es la percepción del propio cuerpo individual como una expresión del amoroso cuerpo del Universo. Trascendemos la separación entre uno mismo y el Universo, así el Universo se convierte en nuestro propio cuerpo. Estamos en contacto con nuestro verdadero ser al enraizarnos y centrarnos en el Tan Tien inferior: Cerebro Abdominal, Segundo Cerebro: el propio centro donde reina la calma.
Tan Tien inferior: proporciona al Cerebro Craneal las orientaciones, datos y la informacíón básica que éste procesará. Lleno de Neurotransmisores. Este Segundo Cerebro por la forma de procesar y equilibrar las emociones que a su vez determinan la naturaleza y la calidad del proceso intelectual del Cerebro Craneal.
 
Esta práctica genera un estado de autoconfianza energética al ponernos en contacto con nuestro depósito de alta frecuencia y energía. En este estado el Chi, Energía vital recorre nuestro cuerpo y mejora las funciones fisiológicas por si mismo a medida que se producen una serie de reajustes automáticos. Este estado es esencialmente un estado de relajación.
Al relajarnos nos liberamos de las tensiones musculares y emocionales, conseguimos aflojar las articulaciones y la estructura ósea, accedemos a nuestro interior. Esto abre los caminos del sistema nervioso parasimpático, y así reducimos los hábitos externos de los sentidos, a fin de estar conectados con nuestro universo interior. Este proceso de " ir hacia dentro" nos permite desarrollar habilidades internas para poder "salir" hacia afuera. 
Sentimos ...
 
 
Requisitos : Sólo traer ropa cómoda

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